Cuando me senté frente a Astiko, la facilitadora, algo hizo clic dentro de mí. Ella me habló de mi tipo energético, de mi rol como proyectora del ser, y lo más revelador: me dijo que debía eliminar el «tengo que» de mi vida.

De inmediato, comprendí que esa palabra había sido el motor de mi estrés y desconexión personal. Aquel momento me impulsó a dar un giro radical a mi carrera y mi vida. Inicié un profundo proceso de formación en Neo Diseño Humano y organicé varios talleres con Silvia Vega Nirupo. Esto me ayudó a entender aún más mi tipo genético y cómo influía en mis decisiones.

A través de años de sesiones con diferentes facilitadores y un trabajo continuo sobre mí misma, pude comprender no sólo cómo funcionaba mi diseño, sino también los condicionamientos que me hacían actuar de formas que no resonaban con mi esencia.
Fue como abrir una puerta hacia mi verdadera naturaleza. Gracias a ello, hoy, vivo con mayor conciencia, paz y autenticidad, tomando decisiones alineadas con mi ser. Aunque las sombras del pasado aún surgen, sé que el proceso de autodescubrimiento es continuo.

El Diseño Humano me ayudó a entender mis dones, mis potencialidades y mi propósito en la vida. Ahora, mi misión es compartir esta herramienta transformadora con otros, para que también puedan vivir una vida más consciente y alineada con su verdadero ser.